El lugar en el que nos encontramos es la principal estación de ferrocarril de Bilbao. Su nombre oficial desde que se le cambió en 2006 es Abando Indalecio Prieto, pero para la gente de Bilbao es más conocida como estación de Abando o Estación del Norte.
En cuanto a la historia hay que destacar que la estación que vemos hoy en día no es la que estaba aquí originalmente. La primera se construyó en 1863 cuando el ferrocarril llegó a Bilbao (con el recorrido Bilbao-Orduña), pero con los años sufrió importantes deterioros y por eso RENFE mandó derribarla y encargó a Alfonso Fungairiño la construcción de una nueva y más grande estación que se inauguró en 1948.
Hasta los años 80 se mantuvo sin apenas reformas pero las inundaciones del año 83 obligaron a reestructurar la estación, ya que al igual que el resto de Bilbao quedó destrozada.
Cuando cambiaron el nombre de esta estación en 2006, decidieron que fuera el de Indalecio Prieto, ya que este promovió el desarrollo de infraestructuras ferroviarias cuando fue ministro de Obras Públicas durante el primer bienio de la Segunda República.
Lo que más destaca de esta estación es su amplia vidriera policromada. Esta representa la vida y las costumbres de la Villa ya que tiene referencias a la Basílica de Begoña, al puente de San Antón, a los caseríos, la industria siderúrgica, la pesca, el deporte... que son un buen resumen de la historia de la ciudad. La parte central alberga un reloj y bajo él un escudo de España. Esa parte fue retocada en la década de los 80, ya que el escudo original era el que se usaba en la dictadura franquista.
La vidriera está compuesta por 301 piezas y mide 15 metros de ancho por 10 de alto. Fue realizada en 1948, cuando se construyó la nueva estación, por Jesús Arrecubieta del taller de la Unión de Artistas Vidrieros de Irún siguiendo un esbozo de Miguel Pastor Veiga.
Además de las líneas ferroviarias esta estación cuenta con tiendas de regalos, cafeterías, restaurantes, servicios bancarios, servicios telefónicos o alquiler de coches.