Seguimos con la segunda parte del post "10 cosas imprescindibles que tienes que comer en Bilbao:
6- TXAMPIS
Tanto para comer como para cenar en Bilbao, los txampis o champiñones son siempre una buena opción. Los más típicos son los que están rellenos de jamón y queso (y si es Idiazábal, mejor que mejor), aunque también alucinarás con los que preparan a la plancha en el Bar Motrikes (Somera, 41) acompañados con una riquísima salsa ligeramente picante, ¡secreto de la casa! Te chuparás los dedos…
7- TXANGURRO
Aunque no es apto para todos los bolsillos, hay restaurantes en Bilbao donde podrás probar el famoso txangurro o centolla sin arrurinarte, como es el caso de El Rimbombín (Hurtado de Amezaga, 48), un local de toda la vida que ofrece marisco fresco de gran calidad a un precio más que razonable. También puedes probar este productazo de la gastronomía bilbaína en forma de pintxo.
8- PIMIENTOS RELLENOS
No son exclusivos de esta ciudad, pero los verás por todas partes. Con lo bien que se preparan aquí los pescados y las carnes, ya te podrás imaginar que comer en Bilbao unos pimientos rellenos es sinónimo de placer absoluto (¡como todo en esta tierra!)
9- TRIÁNGULOS
Cuando hablo de triángulo me refiero al sandwich de toda la vida, sólo que en Bilbao la elaboración de estos emparedados se ha convertido en todo un arte. En concreto, hay dos restaurantes en Bilbao que se llevan la palma: el Bar Eme (General Concha, 5) y el Bar Alameda (Alameda Urquijo, 40). Los triángulos del primero son todo un clásico entre los bilbaínos. En él presumen de hacer el sandwich más rico del mundo, no sólo por sus ingredientes de primera calidad, como las anchoas del Cantábrico o su mayonesa casera, sino sobretodo por su extraordinaria salsa, uno de los secretos mejor guardados de la ciudad del Nervión. Por su parte, en el Bar Alameda podrás probar sus Felipadas, un triángulo con nombre propio y con un ligero toque picante. ¡Para chuparse los dedos!
10- KOKOTXAS
si encima son de merluza y en salsa verde, ¡más de Bilbao imposible, oiga! La kokotxa es ya de por sí un plato típico de la gastronomía vasca (es la parte inferior de la barbilla de la merluza), pero la receta en salsa verde es genuina de Bilbao. La inventó una señora, Doña Plácida, por allá en el año 1723 al guisar una merluza con mucho perejil en una cazuela de barro y aprovechando unos espárragos que le habían enviado de Tudela. El plato tuvo tanto éxito que aún a día de hoy la receta se mantiene, ¡con cazuela de barro y todo! Si quieres comer bueno y sano, ésta es una gran opción.